domingo, septiembre 30, 2007

EL CIRCO DEL CIELO

“Una cuerda es una bala, el amor un ejercicio, una iglesia es como un circo…” Paez – Tres Agujas

¡Ok! No se que miércoles pasa, pero cada vez me parecen bien acertadas frases que anteriormente me resultaban ofensivas, primero Freud ahora Fito. Aunque soy un seguidor de la música de Fito, de hecho, vengo ahora voy a poner un chin de Fito… ooooook! Ya… la cuestión es que últimamente he visto el circo que podemos hacer algunos cristianos y me he sentado a ver el espectáculo en primera fila. Y, estoy de acuerdo con Fito, claro, definiendo iglesia no como la que el Señor ha edificado (de la cual algunos, probablemente y aunque no lo sepamos, no somos parte) sino como la iglesia el lugar de donde vamos, el show, etc…

Siempre he sido un defensor de usar el entretenimiento y hasta la tecnología para llevar la Palabra, siempre y cuando los que hacen eso consideren el mensaje de la Palabra como algo que no se puede aguar o mezclar con aceite. Pero últimamente… últimamente, he visto ciertos acontecimientos no tan agradables.

¿Cómo lo pongo para que se lea bonito? ¡Hmmm! Ok… vamos a ponerles número:
1- Señores, si vamos a imitar algunas cosas de las que el mundo hace para atraer personas a los pies del Señor, hagamos algo bueno, sino tenemos los recursos o la capacidad para eso (los recursos muy pocas congregaciones lo tienen, así que contemos más con la capacidad de convertir 4 panes y par de peces en una suculenta paella para 5000 personas)… sino tenemos los recursos o la capacidad: ¡NO LO HAGAMOS! Llevo 8 años como líder y pastor de jóvenes (para mi líder es lo mismo que siervo… ¡de verdad!), y les digo que el entretenimiento no necesariamente hace la diferencia.

Quizás sea atractivo para unos cuantos cientos de personas por un día, pero si no hacemos un cambio en como transmitimos la Palabra y en nuestro corazón ¿qué diferencia hará? ¿más personas? Bueno, no creo que Jesús quisiera más personas a costa del entretenimiento. Ya lo hemos dicho, una vez, cuando un grupo de personas creía que Cristo era Chris Angel, y en un acto muy lejano a la mejor de las prestidigitaciones dio de comer a mucha gente, primero las puso en su lugar… y lean Juan 6:66 (¡el número derrrr diablo! ¡buahh jajajajajajaja!). Así que, número (y no se cuando vamos a aprender esto) nos dice poco cuando las cosas no se llevan a la clara, si se llevan a la clara es obvio que número es chulo.

2- ¿Qué pondríamos aquí? ¡Adivinaron! Tele-evangelistas, predicadores sensacionalistas y esos que tienen el poder de gritar y explotarnos los oídos aunque lleven consigo un micrófono. Es un espectáculo desagradable lo que muchos suelen hacer, y en la poca palabra hay sabiduría.


¿Qué otros espectáculos puede haber? ¡Uy! Aquellos que “chatean” con los demonios…

2 comentarios:

Ode dijo...

Hey Fausto!!!

Siempre he sentido curiosidad de saber cual es la necesidad de estar gritando como loco, mucho más si se supone que estas seguro de lo que estas hablando, si tienes fe en lo que prédicas, ademas que pareciera que estuvieran enojados con las personas a las que le hablan. Será que se les olvida que la forma de Dios atraenos es con amor y que no forza a nadie.

Bendiciones

Fausto Liriano dijo...

Ode: Siempre me he hecho la misma pregunta. Conocí al Señor en una iglesia como esa y aunque te digo que me gustaba mucho, nunca me gusto ni los gritos ni la bulla... pero na... siempre me he hecho la misma pregunta...