¡Vive!

Una de las cosas más locas que nos puede suceder es pensar que algo está perdido, que no vale la pena y de repente empiezas a ver vestigios de esperanza. Imagínate algo así pero elevado a la potencia de 10,000. Los discípulos que, en la cruz vieron débil, indefenso y vulnerable, a alguien que parecía indestructible, impecable, imparable, habían perdido la esperanza. Pero ahora empezaban a escuchar noticias: "María lo vió..." "Pedro lo vió..." "Los dos que caminaban a Emaús ¡lo vieron!"

Los dispersos de repente comienzan a juntarse de todas partes para ver si estas historias no eran alucinaciones de gente muy, muy triste. Ahora Jesús aparece a un grupo, a otro, ¡incluso a Tomás que dudaba! Las palabras del Maestro empiezan a tener sentido, la vida eterna empieza a ser algo más que teoría, y la cruz, que parecía el fin ahora encajaba perfectamente en el increíble plan de redención de Dios. ¡Jesús vive! Y eso... eso lo cambia todo.

Si me preguntas por qué un puñado de hombres ordinarios a quienes el imperio no le prestaba la más mínima atención llegó a transformar al mundo, te diría que la resurrección le dio fuerza a todo lo que antes habían vivido. Bajo el lente de la resurrección de Jesús la esperanza aumentaba, la fe se fortalecía, y la vida... ¡ahora tiene sentido!

¿Tiene sentido tu vida como creyente? ¿Cómo encajan tus pruebas, el dolor, la sumisión? La Resurreción de Jesús nos ayuda a ver la esperanza que hay para nosotros: PORQUE EL VIVE NOSOTROS TAMBIEN VIVIMOS, Y SI EL VIVE: NOSOTROS TAMBIEN VIVIREMOS. El dolor, la muerte, el sufrimiento, la confusión: tendrán fin, pero la vida de aquellos que creen será para siempre, desde ahora hasta el infinito. La cruz nos ayuda a ver que necesitamos morir al YO, pero ¿si el "yo" muere que esperanza tengo? La resurrección nos ayuda a ver que un "nuevo yo" de acuerdo a la voluntad de Dios y con un corazón conectado con Él es la vida con más calidad que pudiésemos tener.

Si yo fuese tú, me tomase toda la semana para pensar en esto.

¡Resucitó!
------------------------------------------------------
Fausto Liriano • www.veldugo01.com
Bajo Licencia Creative Commons

Valientes De Ultimo Minuto

En el momento más confuso, dos de los discipulos secretos de Jesús son los que ejecutan acción. Nadie sabía que estos se reunían con Jesús o que compartían con Él cierta simpatía. Su identidad como "cristianos" no había sido revelada por miedo a que otros los rechazaran o a perder cierta posición en el ambiente político o religioso judío. Pero en el instante en que el cuerpo de Cristo "no tiene doliente" ellos toman acción, sin importarles que esto significaría no tomar la pascua y ser "dos impuros" andantes durante el resto de la fiesta.

No creo que aplique juzgar a Nicodemo y a José de Arimatea por cuidar más su reputación que su relación con Dios, o a los discípulos por huir en este momento tan crucial. A lo que si quiero llamar la atención es que: algo pasó con Nicodemo y con José al ver a Jesús en la cruz. Creo que en la experiencia de la cruz los dos hombres se dieron cuenta de algo que los demás discípulos no entendieron sino hasta unos días después, cuando Jesús resucitó y reflexionaban con cuidado en cada hecho. Estos dos hombres entendieron que ahora Jesús era su pascua, era el Cordero sacrificado para su liberación, ¿para que proteger más su reputación, su vida, si su Amigo Eterno había dado su vida por ellos? ¿qué importancia tenía un evento anual frente AL EVENTO que les daría aliento eterno? Todo lo anterior (reputación, celebraciones religiosas, estatus) no hacía sentido frente a la importancia de estar con Cristo.

Un día, algún evento o situación probará cuán cercanos estamos de Cristo, y cuando suceda:
si estamos en oculto ("cristianos de la secreta") que esto nos de la valentía para salir a la luz...
si la situación nos hace huir de Cristo que tengamos la valentía de volver a El...

Que su gracia nos sostenga y nos preserve.
------------------------------------------------------
Fausto Liriano • www.veldugo01.com
Bajo Licencia Creative Commons
Foto Cortesía de Thomas Hawk
Usado Con Permiso Bajo Licencia Creative Common

No Hay Mayor Amor Que Este

"Nadie muestra más amor que quien da la vida por sus amigos."

Jesús (Juan 15:13 TLA)

He conocido mucha gente que habla en exceso, pero solo un pequeño porcentaje de lo que dice se vuelve acción ¡y solo si son presionados a hacerlo! Este es un serio problema de la mayoría de seres humanos, especialmente en una época donde "los mitos racionales" son tan comunes que ya no sabemos distinguir entre la realidad y la mentira.

¡Con Jesús no es así!
De todos los individuos que han pisado esta tierra nadie ha sido tan coherente y equilibrado en sus palabras y acciones que Jesús. Yo se (porque a mi también me ha pasado), yo se... que tienes esos amigos con los que siempre has contado y que en el momento "de la verdad", sus intereses personales están por encima que el amor o la amistad que sienten por ti. Cuando uno llega a cierta edad (y me refiero a casi los 30... jajajaja!), uno sabe que no sabe con quién contar, y aprende a darle el espacio a la gente y decirle "No te preocupes man (aunque decepcionados en algunas ocasiones)... lo entiendo."

Los discipulos no entendieron lo que Jesús les decía, hasta que pasó:
Fue burlado...
Golpeado...
Cargo su cruz...
Fue crucificado...
Murió...
Dando su vida por ellos...
Sus amigos...
Nosotros...

Hizo lo que... dijo.
La relación de palabra y acción era tan evidente, que casi 40 años después, uno de sus discípulos, un abortivo como el mismo se hacía llamar, dijo:
"... estimo todo como pérdida por la excelencia del conocimiento de Cristo Jesús, mi Señor. Por su amor lo he perdido todo, y lo veo como basura, para ganar a Cristo y ser hallado en él..." (Filipenses 3:8-9) 
¡Pablo sentía tan profundamente el amor de Cristo en su obra de redención que lo único que le hacía sentido era seguir ese ejemplo y ser encontrado en Cristo!

He escuchado este cliché: "Todos los viernes son 'Viernes Santo'." Y eso fuera cierto si nuestras acciones guardaran una estrecha relación con nuestras palabras. Pero tú sabes que no siempre es así. Así que: hoy... hoy es un día especial para pensar en nuestro Amigo Eterno, que sufrió hasta la muerte para que tengamos vida y vida por siempre. Jesús se tomó nuestro pecado en serio, tan en serio que hizo lo que debía hacerse para erradicarlo, porque se tomó la vida en serio murió por nosotros para que su muerte sea en nosotros un asunto de vida. 

Hoy no es cualquier viernes. Hoy es EL VIERNES de dar esa caminata donde estés, e interiorizar esto hasta que sea un hecho y no solo sonido y viento.

"Porque también Cristo padeció una sola vez por los pecados, el justo por los injustos, para llevarnos a Dios" 1 Pedro 3:18 (RVC)
------------------------------------------------------
Fausto Liriano • www.veldugo01.com
Bajo Licencia Creative Commons
Foto Cortesía de Thomas Hawk
Usado Con Permiso Bajo Licencia Creative Common