ROAD TRIP... 2

En las últimas semanas pasaron muchísimas cosas buenas:
1- Pasé tiempo con Alex y Chava, buenos amigos que conocí a través de la blogosfera y que me permitieron invadir su casa, beber su café, usar su Internet, tocar su piano. Es increíble como nos conocimos por este medio y ahora tenemos una amistad que parece de toda la vida. Fue mi primera visita a Tampa, que de hecho no era para nada como lo esperaba, tenía en mi cabeza el marco Florida versión Miami. Pude conocer su pastor, súper buena onda como dicen los argentinos, y darme una vuelta por la oficina de Mindclay que es donde trabaja… ¡Gracias Alex!

2- La segunda parada fue en Louisiana, donde un pastor dominicano está haciendo la diferencia. Estuve compartiendo la Palabra con los jóvenes de su iglesia y conociendo un poco de lo que ellos están haciendo en Baton Rouge y en New Orleans. El y su familia me ganaron el corazón, y puedo confesar que su hijita de 4 años con Síndrome de Down simplemente cambio mi forma de pensar respecto a las personas que sufren de este deceso: siempre sonriente, sumamente especial y la alegría de la familia.
La ciudad de New Orleans es Bohemia y versión Zona Colonial de Santo Domingo, con sus dosis de liberalismo y un poquito de magia negra. Es sorprendente como hay una iglesia cada cierta cantidad de cuadras y como se hace tan difícil alcanzar a esta generación Bohemia…

3- Mi tercera parada fue en California: Los Ángeles, Chino Hills, Costa Mesa, San Diego, Long Beach… buenos amigos, familia, es como en casa pero mi casa es mejor. Pude disfrutar ver las respuestas a mis oraciones de hace meses, dos de mis amigos que habían estado fuera del ministerio por un buen tiempo y quienes estaban sufriendo a causa de esto, fueron bendecidos en posiciones pastorales. Uno en una iglesia muy conocida como Pastor de Grupos Pequeños (¿qué es eso?) y el otro en una iglesia que está en descenso pero que estoy seguro los va a encender. Mis oraciones siguen con ellos y fue la emoción del viaje. Pude ver U2 en concierto 3d (en Tampa manejamos una hora y cuando llegamos al cine la cinta estaba dañada), ¡aperísimo! como estar en el concierto... pero... como estar en el concierto...

4- Mi otra parada fue en San Antonio, Texas, a visitar uno de mis mejores amigos: Jetro y a su familia, y también a compartir en su congregación. Pude compartir el domingo en la mañana y el martes para los jóvenes, tuvimos un excelente tiempo… No sabía que San Antonio es una de las ciudades de mayor influencia turística en Estados Unidos (por lo menos eso dicen), la caminata por el río es una de mis favoritas, y el Álamo muy bonito pero ni sabía de su existencia hasta este viaje (disculpen mi ignorancia).

5- Desde San Antonio viajamos en carro hasta Miami: Houston, Louisiana, Missisipi, Alabama… 30 horas!!! De las cuales 24 fueron sin dormir más que 2 horas. ¿lo volveremos a hacer Jean? Bueeeee…. De ahí a casa…

Lo más triste de todo el viaje: mi esposa no estuvo conmigo, los últimos días fueron como visitar la santa inquisición, no como museo sino como un acusado de hereje…
Gracias a todos los que me recibieron, los nuevos amigos, y no creo que vuelva a hacer ese viaje de 30 horas en carro por nada en el mundo…