viernes, marzo 13, 2009

27- PREDICANDO POR PAN

De detrás del altar, de donde estaba la oficina y los baños de la iglesia en la que di mis primeros pasos como cristiano*, salía el pastor Fellé, con cara de cansancio y enojo al mismo tiempo. Era algo así como medio confuso porque era enojo pero compadeciente, frustración pero comprensiva; no soy muy bueno dando descripciones porque tampoco soy bueno recibiéndolas, asi que... algo así. Había estado hablando con un amigo predicador, alguien que ya varias veces nos había bendecido con sus palabras, y cuyo nombre ahora no recuerdo.
- "¿Tú sabe´ lo que e´eso?"- me dijo en buen dominicano. "Me está preguntando si podemos dejarlo predicar una noche de estas, no tiene dinero y necesita la ofrenda."

Tenía unos 8 meses siendo cristiano y no entendía esa tipo de cosas (todavía no las entiendo), creo que mi pastor tampoco. No supe que responder en ese momento, y como muchas veces hago (unas tantas bien, otras mal) me quedé callado haciendo mi gesto de "imagínate". Todavía no había desarrollado un espíritu crítico a ciertas cosas como quizás ahora lo tengo, pero fueron de esas situaciones que iban formando mi manera de pensar hacia el futuro.

¿No era mejor pedir una ayuda? ¿Decir que estaba pasando por un mal tiempo y que necesitaba que le diéramos algo? ¿Cuánto valían sus palabras? Y después de todo: ¿son suyas o le pertenecen a Dios? Si le pertenecen a Dios, ¿es algo que él debe de ponerle precio? Lo más probable necesitaba sentirse que estaba ganándose la "ofrenda" (si es que las ofrendas se ganan) pero en ese caso ¿qué podría uno ganar por decir la verdad?

Supe que Fellé le dio la ofrenda aunque no lo llevó a la iglesia, y no lo vi más predicando, solo una vez que estuvo y saludo a todos. Pero desde ese entonces me di cuenta que era algo muy común, y no se como llamarlo (uno debe ser cuidadoso con hacer juicio en ese tipo de cosas), pero mientras más pasaba tiempo haciendo cosas en la iglesia, más me enteraba de las extrañas culturas de los itinerantes evangelistas. Esos que predican por llamado pero que a veces ya predican por pan.

*siempre guardo respeto a la "Iglesia Evangélica en Marcha, Inc." donde crecí como cristiano y donde se me dieron las primeras oportunidades de enseñar, de cantar, de hacer música

4 comentarios:

Fray Marcos dijo...

Igual, creo que hay que hacer una diferencia: no es lo mismo uno que pide una ofrenda por necesidad a uno que cobra por predicar, esos ya son comerciantes.

Y hoy en dia hya mas comerciantes que antes...

Un abrazo.

Fray Marcos dijo...

Me llego tu mail...varias personas me comentaron el mismo problema que vos.

El tema es asi: entras por blogger.com (como cuando publicas en tu blog) y recargas mi pagina. Te va a aparecer "publicar como..." y tu nombre.

O pones la opcion de URL NOMBRE.

Un abrazo.

Fausto Liriano dijo...

Fray: como te escribí a tu mail NO FUNCIONA, es esa forma de comentar que impide que algunas personas comenten, no se si es parte del template o qué... intenté lo que me dijiste y nada, intente otras cosas y nada... pero bueno, como quiera disfruto tus post...
DTB hermano!

Fam. Vera Tomala dijo...

http://cristosalvafamilias.blogspot.com/
hola visiten mi blog tambien, abrazos Dios les bendiga