Bueno, retomo la conversación de liderazgo que inicié hace algunos días. Quiero iniciar con algo que tomo del blog de Anyul, "El Antilíder":
"El viernes pasado, en el refugio que reserva para sus amigos, el maestro ninja me contaba algo así:
—Un pastor exitoso me dijo que un verdadero líder sabe a dónde va, que planifica su camino con diez años de anticipación, que decide dónde quiere estar dentro de diez años, y hacia allí se dirige.
Hizo una pausa breve, fijando la vista en el vacío, y continuó:
—Pero yo creo que el hombre de Dios es la antítesis de eso. El hombre de Dios, me parece, es uno que no sabe bien a dónde va. Que conoce el próximo paso, o tal vez los próximos dos. Que no sabe a dónde conduce eso que está haciendo o viviendo. Pero que un día mira para atrás y se pone contento y dice: "creo que he andado por donde Dios quería...!"
El maestro ninja no sabe que lo es. No es famoso ni admirado, pero sí querido. No ha amontonado dinero ni es el prototipo del éxito. Y yo estoy orgulloso de ser su amigo."
1 comentario:
Creo que entiendo la idea. Mira, en la iglesia de hoy se ha tergiversado el sentido de lo que es un líder, hoy vemos lideres que en vez de ser lideres son Caciques o tiranos, perdón por la referencia pero esa es la imagen que algunos están vendiendo, a veces se ponen en una silla lejos del pueblo otros son inalcanzables. Pero esto no es lo que conocemos de Jesús, Jesús no andaba diciendo: "YO SOY EL LÍDER" O "YO SOY EL QUE SABE", al revés el cuando sanaba a alguien le decía no se lo digas a nadie, su fin no era ser el gran ministro, sino servir y ministrar para la Gloria de su padre! Muy buen tema el que has iniciado pa' lante!
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